Últimos minutos del mundo, de un mundo, al borde de la destrucción total a manos de un planeta errante. Dos mujeres, hermanas, y el hijo de una de ellas se resguardan en una pequeña tienda de campaña-escudo construida con unas ramitas. Lars von Trier captura la expresión final de cada uno de los personajes, desde la agonía de la hermana mayor, sepultado en su creencia de que el apocalipsis podía pasar de largo, a la imperturbable serenidad del niño, confiado en la versión del mundo que le ha proporcionado algo en lo que creer frente al final de todo. Versiones, relatos del mundo, desde el que provee la ciencia al que mantiene la razón; relatos que Melancolía pone en cuestión, como vestigios de un presente en situación de derrumbe, donde cada uno de los elementos de nuestra realidad es sometido a una evaluación. Relatos que alumbran el devenir de la Razón, de la Cultura, de la condición humana ante el eclipse de sus ideas.
En La crisis de la experiencia y el final de los relatos en Melancolía: apuntes a la luz azul del fin del mundo, Núria Molines elabora un apasionante recorrido por estas dos visiones del mundo, ejemplificadas en las dos hermanas protagonistas, que colisionan con el astro destructor como observador indiferente. Dos visiones/versiones del mundo condenadas a desaparecer, como aquellos relatos que la Modernidad se encargó de enterrar al mostrar sus fallas internas. Unas heridas profundas que Lars von Trier alumbra con la potente luz de su melancolía. La melancolía de nuestro tiempo.
Número cuatro
Bande à part
Ilustraciones: Núria Molines